NI MÁS NI MENOS QUE AMOR

      Hay un montón de falsedades en lo que te he escrito hasta ahora, una gran cantidad de falacias, metáforas y recursos poéticos de cuarta, baratos como un par de guantes comprados en la calle. Debo reconocerlo, no he logrado escribirte la verdad y entonces me he dedicado a recuperar frases cursis y de dudosa procedencia. Porque, dejame decirte, vos nos sos como el sol, no brillás incondicionalmente, vos tenés una gran nube oscura que te deja en penumbras a veces y eso, querida mía, me asusta. De ninguna manera poseés la suavidad de una brisa veraniega de media tarde, más bien sos un vendaval, una tormenta eléctrica desproporcionada y exagerada, cargada de rayos que pueden derribar las raices más fuertes de esto que llamamos "nuestra relación". Tu boca... ¿qué decir de tu boca?... Tu boca no sabe a miel ni a fragancia de flores en primavera, no, tu boca sabe a verdad dolorosa, a dientes apretados en medio de una discusión sin sentido, a insulto y maldición por un amor que no entiende razones. Hacer el amor con vos no es una danza de cuerpos en armonía, para nada, hacer el amor con vos es coger, matarse en una cama sin dejar nada a nadie, tomar todo entre las manos y las piernas y exprimir hasta la última gota de sexo, de pasión, de locura, de sentir cómo estalla el mundo delante de nuestras narices y solo quedan unos ojos de mirada rabiosa y penetrante que aunque nos sorprendieran las peores catástrofes no podrían separarnos, moriríamos ahí mismo, en medio de ese cerco impenetrable que nosotros llamamos amor.
      Así es, esto no es poesía, no son luces, ni estrellas, ni ríos, ni nada. Esto es amor, tremendo, desgarrador, inconsciente y tirano. Esto es amor, cuatro letras que dicen más que cualquier tratado filosófico. Esto es amor, verdadero, bueno, malo, apocalíptico, todo junto. Esto es amor, esto que sentimos ahora, acostados en silencio mirandonos a los ojos, que no son más que nuestros ojos. Como vos y yo, que no somos más que este amor.

RR