HUELLAS

     Hola vos. Ahora me doy cuenta, perdoname, soy un poco lerdo. Te fui a buscar al infinito y en realidad estabas acá, caminando esta tierra, bajo este sol tan de todos. Me sumergí en las cavernas más profundas y resulta que vos corrías felíz por el campo, que caminabas entre la gente a la vuelta de una esquina cualquiera. Y pinté un cuadro surrealista cuando vos eras hiperrealismo. Bueno, ¿querés saber?, ya no hay metáforas ni poesía, solo queda este espacio que dejaste y que será ocupado por alguien más algún día. Y claro que me voy a acordar de vos, si, al fin y al cabo, te busqué en cada una de esas esquinas. Y aunque supe siempre donde encontrarte preferí dejarte ser y confiar en ese destino del que habla Cortázar. Pero el destino lo hace también cada uno y si tu destino no es el mio entonces la vida continúa, las heridas se cierran, los sentimientos se enfrían, los pensamientos se aplacan. Por un momento creí que eras vos pero hoy prefiero creer otra cosa, no porque sea más fácil, solo como una especie de placebo, como subir la música para no escuchar la tormenta. Me he despedido de vos ya muchas veces y nunca me he ido por eso esta vez voy a ser más honesto y realista. No me despido. Te acomodaré entre los libros y las canciones... y te querré hasta que ya no te quiera.

RR

(Escrito en abril de 2013 con otros vientos y otras lluvias)